El proceso completo de implante dental puede tardar en promedio entre 6 a 10 meses, pero el tiempo varía de un paciente a otro. Aunque el proceso de implantación no es complicado, es un procedimiento quirúrgico que requiere varios pasos. Dependiendo de tu salud bucal, es posible que se requieran uno o más tratamientos dentales antes de la inserción de la raíz artificial para preparar la boca para un implante dental. Además, el proceso de curación es diferente para cada paciente según el caso.
Los buenos candidatos para implantes dentales tienen huesos y encías sanos. El tabaquismo, la mala salud de las encías, la recesión ósea, las enfermedades crónicas y otros factores de riesgo afectan el proceso de implantación y si un paciente es candidato para los implantes. La buena salud bucal es imprescindible para el éxito del implante.
Paso 1: preparación para un implante dental
Para que un implante se sujete con éxito, debe haber suficiente hueso y tejido en la mandíbula para que el implante se ancle. El prostodoncista también realizará radiografías, hará una examinación y tomará medidas en preparación para el implante.
Paso 2: Colocación de raíz artificial
La raíz artificial del implante es un pasador de titanio que se implanta en la mandíbula. Esta raíz permite que el dentista monte el diente de reemplazo o el puente en la mandíbula. Después de varios meses de cicatrización, el hueso se fusionara con el implante.
Paso 3: Colocación de la corona
El dentista crea un diente artificial que coincide con la apariencia, la forma y el color de los dientes naturales, tomando impresiones y medidas. Después, el prostodoncista coloca un pequeño poste conector o pilar al implante: esto anclará el nuevo diente en la mandíbula. Luego el diente se fija al pilar y el diente artificial se verá y funcionará como un diente natural.